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1 de Febrero de 2022 | 13:35
Hogar y familia

Organizando unas mudanzas en Alcalá de Henares

 

Cambiar de piso, sea porque queremos o porque el contrato de alquiler en el actual está a punto de expirar, supone siempre inaugurar una época de estrés de la que difícilmente vamos a poder librarnos; y esto es así tanto si nos mudamos en Madrid, Barcelona o ciudades especialmente pobladas, como si contratamos el servicio de mudanzas en Alcalá de Henares y en ciudades de tamaño moderado. Moderado, pero no pequeño; a fin de cuentas, no faltan museos, avenidas, centros de estudio y lugares de ocio en Alcalá de Henares, como tampoco será complicado encontrar un piso a buen precio y bien situado. Eso sí, necesitamos tiempo.

Tiempo para, entre otras cosas, decidir qué época es la mejor para nosotros a la hora de mudarnos. Actualmente hay muchas variables que prácticamente toman esa decisión por nosotros, ya que escapan a nuestro control. Por un lado, la pandemia de la COVID-19, pues evidentemente tendremos una mayor preferencia por efectuar una mudanza en una semana o un mes en el que la incidencia de casos y el riesgo de contagio sean especialmente bajos. Por otro, nuestra propia situación económica. Aunque seguramente ya tengamos un fondo de ahorros para nuestras mudanzas en Alcalá de Henares, hacerlo cuando acabamos de cobrar, por ejemplo, es mejor idea.

Por lo tanto, podemos esperar a finales de mes o principios del siguiente; o incluso, si tenemos la suerte de ser funcionarios, a la paga extra de Navidad, que nos permitirá disponer de un colchón económico todavía mayor. A fin de cuentas, no importa si nos mudamos en Alcalá de Henares o lo hacemos en cualquier otro lugar, en todos los casos, y por regla general, tenemos que pagar no solo el primer mes de un piso de alquiler, sino también la fianza y seguramente la cuota de la inmobiliaria que nos haya ayudado a encontrarlo.

Todo ello, sumado al precio de la mudanza en sí, supone un presupuesto considerable que tenemos que estudiar bien. Mudarse es, en resumen y como ya hemos dicho, estresante. Pero no tiene por qué complicarse si nos organizamos bien y con prudencia.